La Literatura

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Esencial de la vida

jueves, 28 de octubre de 2010

La masacre injusta


Por: Angie Carrión

Las cruces sobre el agua es una obra literaria escrita por el célebre autor Joaquín Gallegos Lara, y se escribe en el año 1946 en el gobierno opresor de José Luis Tamayo, gobierno que fue injusto y cruel,  él fue quien ordenó que respondan con fuego el 15 de noviembre de 1922.
Lo obra es titulada las cruces sobre el agua, porque  el autor se basa en la masacre del 15 de Noviembre de 1922, donde murieron obreros por el reclamo de sus derechos, por mejoras de las condiciones de vida y el gobierno de turno les respondió con fuego y cuyos cadáveres fueron abiertos y llenados con piedras y arrojados al río Guayas, luego de esto surge la leyenda que de tiempo en tiempo las personas decían que los cuerpos aparecían flotando y con una especie de cruces sobre el agua.
Esta obra recoge todo el ambiente de dolor, angustia, y la preocupación por buscar el pan de cada día, por parte de la clase obrera y sus familias que vivían en condiciones de miseria. El lenguaje y el estilo que utiliza el autor es claro y preciso; a través del lenguaje el autor sugiere lo que va a pasar y utiliza la descripción para relatar los  sucesos que van tomando forma en la obra. De esta manera nos transporta a aquel momento en que se efectuaba la huelga y luego la masacre..
La novela nos amplia el derramamiento de sangre que ocurrió el 15 de  noviembre de 1922, la causa el reclamo justo de los trabajadores por ser pésimamente pagados. El personaje principal Alfredo Baldeón quien es un panadero del suburbio de Guayaquil (quien representa al pueblo) junto a Alfonso Cortés (representa la pequeña burguesía) organizan un sindicato y debaten reuniones clandestinas acerca injusticias laborales abusos contra la clase obrera como despidos intempestivos, maltrato humano, etc. La miseria, el hambre hizo que buena parte del pueblo se una a la huelga y reclamo de mejoras de vidas para todos y la fuerza pública los repelió con fuego, murieron miles de personas, como una forma rápida de minimizar el acontecimiento la solución  fue arrojar los cuerpos llenos de rocas para que no floten  y no se conozca la verdadera cantidad de víctimas de esta masacre.
Joaquín Gallegos Lara escribe la obra las “cruces sobre el agua” con el afán de denunciar el sistema opresor, injusto e inhumano de quienes ostentaban el poder de aquella época.  
Esta obra siembra en el corazón ecuatoriano ese espíritu de lucha infatigable por una sociedad más justa, así como nuestro antepasados lucharon por su libertad de los españoles, así en épocas como aquella que supuestamente eran ciudadanos libres y digo supuestamente por que la explotación del “hombre por el hombre” aun existía y existe en nuestro tiempo, ya no se llamaba esclavo pero se lo explotaba sacándole la mayor rentabilidad posible dándole la mas mínima calidad de vida, por aquello el pueblo salió a las calles hombres, mujeres, jóvenes, ancianos, trabajadores, en sí todos reclamando a una sola voz una mejor vida; una en la cual no falte alimento en su mesa ni un techo donde abrigarse , un hospital, una escuela, una universidad donde formen profesionales para desarrollo del país y no desempleados que terminen emigrando al exterior buscando esas mejoras de vida.  Hermanos de mi patria no podemos olvidar a aquellos héroes anónimos que dieron su vida para reclamar no solo por mejoras laborales sino también mejoras en la calidad de vida,  no solo para ellos  pues nosotros vivimos logros alcanzados en aquellas huelgas, luchas, batallas… Tenemos la obligación de luchar por un Ecuador mejor; más justo, menos corrupto, más solidario con los que menos tienen, luchar por un Ecuador con políticas de estado que los gobernantes de turnos no vulneren, etc. Para  nosotros para nuestros hijos y sus hijos para generaciones futuras de nuestro Ecuador país de valientes luchadores.

Fuente: Libro “Las cruces sobre el agua”

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